Perito asegura que la muerte de Facundo Astudillo Castro fue «violenta y por asfixia»
La experta comentó que el ADN permitió saber que el cuerpo es el joven. Criticó el accionar de la fuerzas policiales, cuya instrucción no incluye contenidos de Derechos Humanos «sino únicamente control de situaciones».
Virginia Creimer es médica forense y perito de parte de la madre de Facundo Astudillo Castro. En diálogo con Radio Nacional Resistencia se refirió a las instancias en las que se encuentra la investigación luego de confirmarse que los restos hallados el 16 de agosto son del joven, quien desapareció el 30 de abril cuando salió de Pedro Luro hacia Bahía Blanca.
En ese sentido, aclaró que los estudios para confirmar que los restos son de Facundo iniciaron con el ADN, «que es un estudio importante, pero aún falta otros, por lo que confirmación tardaría alrededor de 30 días».
Con respecto a la información sobre la causa de muerte del joven de 23 años, aseveró que fue «muerte rápida y violenta por obstrucción de las vías aéreas por compresión en el cuello o sumersión en líquido de forma violenta», conclusión a la que llegaron por los dientes teñidos de sangre.
«Eso se produce por un aumento de la presión de la sangre a nivel del cuello y la cara. Como la muerte se da con rapidez, esa sangre no vuelve al torrente sanguíneo y la dentadura continúa teñida de sangre», explicó.
La especialista dijo que su tarea es: “es sumamente dura, lleva mucho tiempo, muchas horas e implica una enorme responsabilidad, y a todo eso hay que agregarle la expectativa de la familia que lleva meses esperando una respuesta”, expresó.
Fuerzas de seguridad sin instrucción
La muerte de Facundo puede enmarcarse en lo que respecta a violencia institucional, debido al involucramiento de la fuerza pública. Al respecto, Creimer resalta que “es sumamente difícil [avanzar con la investigación] por las obstrucciones que en general producen otras fuerzas de seguridad e impiden investigar con tranquilidad».
«Las fuerzas de seguridad tienen un rango o un nivel en el que se autocomandan, y eso es producto de una instrucción que está atravesada por la decisión de controlar a la comunidad y no por el respeto a los derechos humanos”, agregó la perito.
Expresó también que «la instrucción que reciben las fuerzas abarcan en control de distintas situaciones, pero no atravesadas por los derechos humanos, sino por el dominio de los otros».
