26 de septiembre: Saludamos a los Cirujanos en su día
Fue el primero de diecisiete hijos del cirujano militar Francisco de Argerich, un catalán afincado en el virreinato del Río de la Plata. Después de completar su formación básica, fue enviado a España a estudiar medicina en la Universidad de Cervera, donde se doctoró en 1783.
En España, se casó con Margarita Martí y tuvo a su primer hijo al que llamó como su padre, Francisco, que también llegó a ser un destacado médico. Sus primeros años como profesional los ejerció en Barcelona, hasta su regreso al país en 1794 donde fue nombrado médico del “Colegio de Huérfanos”. Poco tiempo después, se convirtió en el “Primer Examinador del Protomedicato”, una institución encargada de la salud pública y de la formación de médicos.
Argerich participó en la lucha contra los brotes de viruela de 1794 y 1796, logrando introducir la primera vacuna e inoculando gratuitamente a quienes lo solicitaban. Durante las invasiones inglesas, se destacó por atender a los heridos tanto criollos, como británicos e integró la “Logia Independencia” después de ser iniciado masón. Participó en el cabildo abierto del 22 de mayo de 1810. donde se pronunció contra el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros.
A pedido de la Asamblea del Año XIII, Argerich creó el “Instituto Médico Militar”, del cual fue nombrado director y cirujano mayor del Ejército. Allí, formó una generación de médicos porteños. Desde 1813 se desempeñó como cirujano del Ejército del Norte, acompañando al general Manuel Belgrano y asistiendo a los heridos de las batallas de Tucumán y Salta.