Deuda Externa: Chaco acordó con el 93,34 de los acreedores y ahorrará USD 212 millones hasta 2024
Esto le permitirá a la Provincia estirar los vencimientos de su deuda hasta 2028 y bajar fuertemente la tasa de interés para volcar las inversiones en más obras públicas. “Estamos defendiendo los intereses de nuestro pueblo: la necesidad de las chaqueñas y los chaqueños de acceder a un mejor salario, al empleo y a la vivienda digna”, aseguró Capitanich.
El gobernador Jorge Capitanich junto a la vicegobernadora Analía Rach Quiroga y al ministro de Planificación, Economía e Infraestructura, Santiago Pérez Pons, anunció la reestructuración de la deuda externa en condiciones favorables para la provincia con un ahorro de 212 millones de dólares hasta 2024. “Se trata de un proceso de reestructuración que nos generará un ahorro muy importante y un horizonte previsible para invertir más en la reactivación económica de nuestra provincia”, remarcó Capitanich.
Es que luego de 5 meses de intensas negociaciones con fondos de inversión extranjeros e inversores institucionales, el Ministerio de Planificación, Economía e Infraestructura llegó a un acuerdo para reestructurar el Bono Internacional 2024 que cuenta con la adhesión del 93,34% de los acreedores. De esta manera, la Provincia superó ampliamente la barrera legal de 75% necesaria para poder avanzar en el proceso de reestructuración, con un estiramiento de los plazos de vencimiento y una reducción sustancial de la tasa de interés, que garantizan la restauración de la sostenibilidad de la deuda provincial.
“Cuando asumimos la reestructuración de esta deuda primero buscamos extender los plazos de vencimiento y lo logramos –del 2024 al 2028-, como también hemos logrado reducir deuda de 9,375% a 6,25% y generar un ahorro en flujos de servicios de capital e intereses de deuda; por eso debemos aplaudir esta negociación que representa un gran logro”, dijo Capitanich. Destacó en primer lugar el gran consenso alcanzado con los acreedores, lo que permite generar un horizonte previsible para Chaco y enfatizó como uno de los logros más significativos del acuerdo alcanzado, el ahorro de 212 millones de dólares entre 2021 y 2024, lo que equivale a 21.200 millones de pesos.
“Frente al dilema de garantizar un sistema de pago para una persona rica Nueva York o defender la necesidad de las y los chaqueños de acceder a un mejor salario, a un empleo o a una vivienda digna, hemos defendido los intereses de nuestro pueblo y eso no va en detrimento de nadie”, enfatizó en referencia a las condiciones de la ardua negociación.
Señaló además que en un contexto adverso, tras la recesión económica de 2018-19, que afectó seriamente a las cuentas de la provincia y al poder adquisitivo de las y los chaqueños, era imprescindible generar un acuerdo con condiciones favorables para la provincia como el estiramiento de los plazos y reducción de la tasa de interés. “Esto significa que en vez de amortizar una deuda que hoy se pudo reestructurar, vamos a invertir más en escuelas, en trabajo, en empleo, viviendas y en mejor calidad de vida”, dijo.
Capitanich recordó que durante su gestión 2007-2015 la provincia inició un proceso de desendeudamiento y no emitió deuda en moneda extranjera, salvo para la ejecución del segundo acueducto del interior, una mega obra imprescindible para la población. Reiteró así que ya no se puede generar endeudamiento en dólares, sino que debe ser en pesos y precisó que Chaco lidera procesos satisfactorios de endeudamiento en pesos con colocaciones a corto plazo. “Necesitamos una provincia sostenible financieramente con capacidad de intervenir en el mercado de bienes y servicios y propiciar más inversiones para una mejor calidad de vida”, concluyó.
Detalles del acuerdo
El acuerdo que se alcanzó hoy casi por unanimidad implica un alivio significativo para las cuentas públicas chaqueñas equivalente a USD 212 millones hasta 2024. Las principales modificaciones consisten en la reducción de la tasa de interés cargada sobre la deuda (cupón) y en la extensión de los plazos de amortización. Gracias a las gestiones realizadas, ahora el vencimiento de la nueva deuda será en febrero de 2028, mientras que antes era en agosto de 2024.
Además, las cuotas de capital comenzarán en 2024, dándole a la Provincia tres años de gracia, y la tasa original de 9,375% se verá reducida a 4,9% para el periodo 2021-2024 y a 6,25% si se toma en cuenta el periodo 2021-2028. El ahorro al que se arriba en concepto de reducción de la tasa de interés es significativamente superior al de otros acuerdos de reestructuración que se materializaron en el país en los últimos meses.
“Este acuerdo representa un alivio financiero extraordinario y nos permite allanar el camino hacia la reactivación de la economía y la transformación de nuestro perfil productivo”, aseveró Pérez Pons. Dijo además que de esta forma «habrá más recursos para darle sostenibilidad al Plan Chaco Reactiva e impulsar así la obra pública a lo largo y ancho de la Provincia, generar políticas productivas que incentiven el agregado de valor y profundizar la mejora del poder adquisitivo de las familias».
Antecedentes de la deuda
En un marco de sobreendeudamiento a nivel nacional y de restricciones de financiamiento, a raíz de la caída en el nivel de actividad, las provincias argentinas también atravesaron un proceso de fuerte aumento de sus pasivos en dólares entre 2016 y 2019. En el caso de Chaco, la deuda de USD 250 millones fue emitida en el 2016 y su carga sobre las finanzas públicas provinciales se volvió insostenible, producto de una tasa de interés del 10% y de las sucesivas devaluaciones de la moneda, que hicieron aumentar su peso en relación a los ingresos provinciales.
“Chaco, al igual que la Nación y muchas otras provincias, se endeudó en dólares en un contexto de fuerte entrada de capitales especulativos como el que vivimos en 2016. Lamentablemente, la bonanza duró poco y a sólo 24 meses, la Argentina estaba inmersa en una crisis macroeconómica fenomenal con la mitad de las provincias argentinas al borde del default”, remarcó el titular de la cartera económica, Santiago Pérez Pons y advirtió: «Esto se tradujo en menos inversión en rutas, caminos, escuelas, hospitales y ciencia y tecnología».