Policiales

CHARATA: Incendio en una fábrica, preocupa la situación de empleados

En la madrugada del miércoles, un incendio consumió totalmente tres galpones de 25×25 metros, sobre la Ruta 89, en Charata, donde funcionaba una fábrica de indumentaria, detrás de un local que vende maquinarías agrícolas.

El siniestro ocurrió cerca de las 2 dela mañana, por causas que se investigan, en un predio que contiene dos negocios diferentes: el galpón que se prendió fuego, donde funcionaba una fábrica de indumentaria, y en frente un local de venta de maquinaria agrícola.

Según los datos brindados por el dueño de la empresa textil, Roberto Chazarreta, la fábrica opera de seis de la mañana a 22, en turnos rotativos por la pandemia, y a pesar de que contaba con cámaras de seguridad, al igual que la maquinaria y los insumos textiles fueron consumidas totalmente por el fuego.

Si bien no hubo que lamentar víctimas, la destrucción total de la fábrica marcó un impacto en el propietario y empleados que habían llegado al lugar, tanto a la madrugada como en la mañana, mientras la policía y bomberos, investigan las causas del hecho.

Impacto en empleos
“Dada la cantidad de empleados que tenemos en esta fábrica, y la otra; porque el proceso se hace en parte en esta planta y la otra, muchos empleados quedan afectados porque se perdió todo. Acá trabajan 30 personas, y otras tantas satélites que por la pandemia trabajaban desde su casa”, reconoció el dueño de la fábrica.

Según Chazarreta, el turno que se fue a las 22, dejó todo en estado normal. “Después tipo 2 de la mañana nos enteramos que se estaba quemando. Adentro había toneladas de telas, era imparable”, agregó.

Según comentó el propietario, en las instalaciones, tres alas 25×25 metros, se quemaron robots, computadoras, moldería, “y en los últimos 25 metros había un lavadero industrial, y es muy difícil volver a instalar algo así, nos deja inoperante con el proceso de jeans. Estábamos haciendo trabajo para el Gobierno, para la marca Orígenes”

El impacto es importante por la pérdida de máquinas y elementos que formaban parte de un proceso. “La plata es incalculable, pero lo que duele más es la infraestructura, la moldería, el lavadero industrial, que no tenes más. Es muy difícil volver”, reconoció. Había 40 cámaras pero no se puede acceder, ni por el celular, ya que las derritió el fuego.

Pensando en cómo organizarse ante la grave situación, Chazarreta dijo “tuvimos una pequeña reunión (con sus empleados), vamos a dividir en grupos rotativos para cuidar y cuando se enfríe limpiar, para ver lo que queda. Algunas personas pueden seguir en la otra fábrica. Teníamos un proyecto que empezamos para sumar hasta 300 empleados. Esto es todo nuevo, bien organizado, es raro lo que pasó”.
Fuente: Norte

Noticias relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba